Por patagoniasur | 19 de agosto de 2016 | 0 comentarios
Hacemos un repaso al que es sin duda uno de los tesoros más valiosos de la ciudad de Cádiz, sus playas. Con más de 8 kilómetros de extensión, La Tacita de Plata cuenta con cuatro playas diferenciadas: La Caleta, Santa María del Mar, Victoria y Cortadura. Todas ellas bañadas por el océano Atlántico, comparten además arena fina y dorada, aguas tranquilas y moderadas y la posibilidad de la
práctica de ciertos deportes náuticos que ahora os contamos.
Playa de La Caleta, la playa familiar de los gaditanos
Foto de la Playa La Caleta. Realizada por Emilio J. Rodríguez-Posada. Algunos derechos reservados.
Puede que sea la playa más fotografiada de Cádiz con sus barcas fondeadas y la silueta del Balneario de la Palma guardando sus espaldas. En pleno casco antiguo, esta playa emerge escoltada por dos castillos, el de Santa Catalina y San Sebastián, cuyo paseo divide el arenal en dos.
De pequeñas dimensiones, 640 metros en total, en esta playa de aguas mansas, se puede practicar piragüismo y paddle board. También está permitido el fondeo de embarcaciones todo el año.
Playa de Santa María del Mar
Cuando sopla el Levante, este es el refugio de los gaditanos. Con 630 metros de longitud, este recodo del litoral gaditano que se encuentra resguardado por espigones y escolleras, cuenta con un estrecho margen de arena que desaparece al subir la marea.
También conocida como la playita de Las Mujeres, su ubicación la hace perfecta para la práctica del surf. Sin embargo, este deporte solo se puede llevar a cabo fuera de la franja horaria de baño público o en temporada baja.
Playa Victoria
Estamos en la playa urbana más amplia de Cádiz, con una extensión de casi 3 kilómetros de arena dorada y fina que limita por un extremo con la playa de Santa María (con un fondo más rocoso por esta zona) y la residencia miliar y Fuerte de la Cortadura en el otro. Con el Paseo Marítimo de fondo, destaca por ser una playa completísima en todos los aspectos, desde servicios municipales a equipamientos gastronómicos: bares, chiringuitos a pie de playa, zona de juegos infantil, acceso para personas con movilidad reducida… Además, la escasa pendiente que se produce con la subida y bajada de mareas facilita un baño tranquilo, paseos y juegos en su orilla.
En Victoria, una de las más frecuentadas sin duda de las playas mencionadas, se permite la práctica del surf y paddle board.
Playa de Cortadura
Está catalogada como playa seminatural y sus aguas como moderadas. De 3900 metros de longitud, se diferencia sobre todo de sus antecesoras porque conserva un cordón dunar que se extiende hasta la base miliar de Torregorda. Además, se ha conseguido recupera una depresión interdunar de agua dulce, la laguna La Gallega, donde ahora crían anfibios.
En la zona que linda con la playa Victoria, cuenta además con un canal para la práctica de deportes náuticos abierto todo el año (Surf, windsurf, kitesurf, paddle board y piragüismo).